El iMac G4 de Apple fue para muchos, uno de los ordenadores más elegantes aún hoy, que gracias a su diseño de bisagra, podía moverse y ubicarse como mejor convenía a uno sin ocupar demasiado espacio en el escritorio. Sucesor del mítico iMac G3, fue una computadora producida desde principios del 2002 hasta mediados del 2004. Parece mentira que hayan pasado dos décadas, en los que hemos visto a Apple multiplicar su tamaño hasta convertirse en un gigante y una de las empresas más valoradas del mundo, a lomos del éxito del iPhone, y de muchos otros productos. Originalmente conocido como «El Nuevo iMac» el iMac G4 fue creado para reemplazar al iMac G3 como la computadora todo en uno de escritorio de Apple. El G4 es fácilmente reconocible por su pantalla giratoria montada arriba de la computadora hemisférica. En efecto, tenía una pantalla LCD de 15 pulgadas que estaba montada en un brazo ajustable sobre un hemisferio que contenía una unidad óptica de tamaño completo con carga en bandeja y una CPU de cuarta generación (la serie PowerPC G4). Una de sus características es que el iMac G4 se actualizaba gradualmente. Estuvieron disponibles con pantallas LCD panorámicas de 17 pulgadas (43 cm) y luego de 20 pulgadas (51 cm) durante los dos años siguientes. El iMac G4 fue una de las mayores mejoras y avances en el creciente imperio de computadoras de escritorio Mac de Apple. Algunas características nuevas incluyeron una pantalla LCD de panel plano, con medidas diagonales de hasta 20 pulgadas; bandeja de carga de unidad de DVD + CD; y muchas más funciones. Los críticos y los consumidores aceptaron muy bien el nuevo estilo Mac. El monitor flotante era fácilmente ajustable y se colocaba en cualquier ángulo alrededor del fondo en forma de cúpula. A diferencia de los modelos anteriores de iMac, el iMac G4 venía solo en blanco y no era translúcido como los iMac G3, los cuales por cierto, tuvieron forma de huevo. Con este iMac G4, Steve Jobs declaró que el monitor CRT (de tubo de rayos catódicos) había muerto, y no le faltaba razón. Lo más curioso de esta máquina con forma de lámpara que dejó a todos boquiabiertos en su momento, es que hoy en día – a pesar de haber sido reemplazado por el iMac G5 en el 2004 – continúa causando admiración a tantos años de su desaparición. Eso dice mucho de ella, sin duda alguna.
El Rincón de las Telarañas 